Cómo financiamos las reformas de tu comunidad con ayudas del Estado
A diferencia de lo que ocurre con los vinos, los edificios en España no mejoran con el paso del tiempo. Según estimaciones del sector, más de la mitad de los edificios residenciales fueron construidos antes de 1980, lo que significa que tienen más de 40 años y no cumplen con las normativas actuales del Código Técnico de la Edificación. Además, no contribuyen a los objetivos de reducción energética establecidos por la Unión Europea. En Finques Campanyà te contamos cómo puedes financiar reformas en tu comunidad.
En realidad, más del 80% de los edificios en España tienen una baja eficiencia energética, con calificaciones que van desde la E hasta la G, mientras la UE busca reducir el consumo de energía primaria en el sector inmobiliario en un 16% para 2030 y entre un 20% y un 22% para 2035.
La solución pasa por la rehabilitación de estos inmuebles. Para alcanzar los objetivos de eficiencia energética, es necesario renovar gran parte de los edificios en los próximos años. La Unión Europea destaca la importancia de las ayudas públicas, como los fondos europeos Next Generation, que cubren entre el 40% y el 80% de la inversión, dependiendo del ahorro energético logrado. También existen planes autonómicos, como Rehabilita Madrid, que pueden cubrir hasta el 80% del costo de la rehabilitación.
Dado que las ayudas suelen tardar en ser entregadas, es posible financiar las reformas a través de préstamos de entidades bancarias, que adelantan el dinero necesario. Estas entidades ofrecen un proceso integral donde se encargan del proyecto, la ejecución de las obras, la gestión de las ayudas y la financiación. Así, la comunidad de propietarios solo debe tomar la decisión.
Las reformas más comunes incluyen el aislamiento térmico exterior, que mejora la eficiencia energética y la estética del edificio. Reemplazar ventanas y carpintería también optimiza el aislamiento. Además, se pueden renovar los sistemas de calefacción y refrigeración, y optar por tecnologías como la aerotermia o la instalación de paneles fotovoltaicos para reducir el consumo energético.
Finalmente, en edificios con personas con movilidad reducida, se pueden instalar ascensores, rampas y adaptar los espacios comunes para eliminar barreras arquitectónicas.