¿Qué es la tasa de basura y cómo se calcula?
Los ayuntamientos han establecido la tasa de basuras como un impuesto local para financiar el servicio de recogida, limpieza y tratamiento de residuos, incluyendo su reciclaje. Con la directiva europea que entrará en vigor en 2025, se producirán cambios importantes en la gestión de este tributo. En Finques Campanyà te explicamos cómo se calcula.
La tasa de basuras cubre el coste de la recolección de residuos, la limpieza de contenedores y el tratamiento posterior, como el reciclaje en plantas especializadas. Este impuesto se aplica una vez que el servicio se inicia en una localidad. Cada municipio tiene la facultad de fijar el importe anual, y su cálculo depende de diversos factores como el tipo de propiedad (vivienda o local comercial), la ubicación, el tamaño del inmueble y la cantidad de residuos generados. En algunas ciudades, por ejemplo, se basa en el consumo de agua o el valor catastral de la propiedad.
La responsabilidad de pagar la tasa recae sobre los propietarios, inquilinos o usuarios de los inmuebles. En el caso de los alquileres, el arrendador puede trasladar el pago al inquilino si así lo establece el contrato. En las compraventas, el vendedor se encarga de abonar la tasa hasta la fecha de la transacción.
La nueva normativa, derivada de la Ley 7/2022, busca promover la economía circular y establece objetivos de reciclaje ambiciosos: 55% para 2025, 60% para 2030 y 65% para 2035. En España, los municipios deberán establecer una tasa específica para cubrir los costos reales del servicio, sin que esta genere pérdidas. Un cambio significativo será la implementación del sistema de pago por generación, que incentivará a los ciudadanos y empresas a gestionar mejor sus residuos, ya que pagarán en función de la cantidad que generen.
Este sistema traerá beneficios como la reducción de residuos y la promoción del reciclaje, además de una distribución más justa de los costos. La nueva tasa en Madrid, que debe aplicarse antes del 10 de abril de 2025, fijará tarifas según el valor catastral y la cantidad de residuos generados en cada barrio, con una media de 141 euros anuales para viviendas y 310 euros para inmuebles comerciales.
