Qué hacer con un piso pendiente de herencia: guía para alquilarlo
Cuando una persona fallece y deja una propiedad, como una vivienda, el proceso de herencia puede volverse complejo, dependiendo de si existe un testamento y del número de herederos involucrados. En muchos casos, los herederos se plantean la opción de alquilar la propiedad para generar ingresos, lo que lleva a preguntas sobre la posibilidad de arrendar una casa pendiente de herencia. La respuesta depende de varios factores que te mostramos en Finques Campanyà.
Cuando una propiedad es heredada, esta entra en lo que se denomina «herencia yacente», es decir, permanece en un estado legal indefinido hasta que los herederos acepten o rechacen la herencia. Durante este período, todos los herederos tienen derechos sobre la propiedad, pero ninguno puede tomar decisiones individuales sin llegar a un acuerdo con los demás. Si todos los herederos están de acuerdo, es posible alquilar la vivienda en este estado. En ese caso, los herederos firmarían el contrato de arrendamiento en nombre de la «herencia yacente», con el objetivo de cubrir gastos o generar ingresos.
Sin embargo, si no existe consenso, se puede tomar una decisión por mayoría, con la restricción de que el arrendamiento no puede superar los seis años sin un acuerdo unánime entre los herederos. Esto es para evitar comprometer el patrimonio hereditario más allá de ese tiempo.
Al alquilar una vivienda heredada antes de su adjudicación, los herederos pueden obtener liquidez para hacer frente a impuestos como el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, o la plusvalía municipal. Aunque no es obligatorio registrar la propiedad en el Registro de la Propiedad, hacerlo es recomendable para evitar posibles complicaciones.
En cuanto a la declaración fiscal, los ingresos obtenidos por el alquiler de una propiedad heredada deben tributar como rendimiento de capital inmobiliario en el IRPF. Además, los herederos pueden deducir ciertos gastos, como los impuestos municipales y la amortización del valor de la propiedad.
Si la propiedad heredada ya estaba alquilada, los herederos deben respetar el contrato si el difunto era el propietario. En caso de que el difunto fuera usufructuario, el contrato se extingue, aunque los nuevos propietarios pueden renovarlo si lo desean.