Transforma tu vivienda: 6 claves para una reforma orientada al alquiler
Comprar una vivienda para alquilar puede ser una estrategia lucrativa, ya sea para rentabilizar ahorros, invertir en patrimonio o capitalizar una fortuna inesperada. Sin embargo, muchas propiedades en el mercado de alquiler carecen de mejoras o adecuaciones, lo que puede dificultar su arrendamiento o reducir el beneficio potencial. Para abordar esta situación, es esencial considerar varios aspectos antes de decidir realizar reformas en una propiedad con el fin de alquilarla, y que te explicamos en Finques Campanyà.
Determinar cuándo es conveniente reformar una vivienda destinada al alquiler depende de factores como la antigüedad y estado del inmueble, así como el tipo de arrendamiento previsto. En la mayoría de los casos, incluso reformas básicas pueden aumentar el valor de la propiedad entre un 20% y un 30%, facilitando su alquiler y generando ingresos más altos y consistentes.
Las reformas no necesariamente implican obras extensas o costosas; a menudo, ajustes parciales o pequeñas modificaciones con bajo presupuesto pueden marcar la diferencia. Seis aspectos clave a considerar incluyen el tipo de alquiler (estudiantes, turístico o a largo plazo), la evaluación del estado estructural del inmueble con la ayuda de profesionales, y la atención a áreas clave como el salón, la cocina y el baño.
En estas áreas, intervenciones como esmaltar o vinilar los muebles de cocina, renovar los sanitarios del baño o eliminar el bidé para ganar espacio, y retirar el gotelé del salón pueden mejorar significativamente la apariencia de la vivienda sin un gasto excesivo. Además, mejorar la eficiencia energética mediante la revisión de sistemas de calefacción, cambio de ventanas o instalación de luces LED no solo reduce costes operativos, sino que también hace la propiedad más atractiva para los inquilinos.
La reconfiguración del espacio también puede ser beneficiosa; a menudo, menos habitaciones pueden generar una sensación de amplitud y luminosidad. La decisión de amueblar o no la propiedad depende del mercado objetivo; mientras que los pisos amueblados pueden atraer a inquilinos de corto plazo como estudiantes, las propiedades sin muebles pueden ser preferidas para arrendamientos a largo plazo.
Invertir en reformas inteligentes puede aumentar la rentabilidad y la demanda de una propiedad destinada al alquiler, maximizando su potencial como inversión.